Dall Italiano - Tabernes de Valldigna

Después de varios intentos de deleitarme con tu cocina, obtengo una mesa de cena y supero mis expectativas. Aunque pido el menú nocturno, es suficiente para ver la calidad de los platos. surtido de productos de origen italiano y hacer pasta fresca diariamente. comimos tagliatelle al ragú ( sabor espectacular intenso) y tagliatelle con hongos y trufa fresca. En cuanto a la pasta, impresionante, de lo mejor que hemos probado. Teníamos la tabla de degustación de fiambres y quesos italianos con el crescentine hecho a mano muy bueno y luego la burrata. y postres caseros al nivel que merece. buena presentación de los platos, excelente servicio del personal y su responsable (tefán). todo muy agradable, profesional y atento. para volver y repetir! Felicitaciones stefano! como indicamos, este viernes re-testamos la buena cocina de stefano. Ahora hemos intentado pizzas y otra vez su pasta. ¡Muy bien! Aunque están de vacaciones, el tratamiento del personal es excelente. el tratamiento del cliente es muy cuidadoso. Siempre estás feliz. ¡Felicitaciones a todo el equipo!

Hemos disfrutado de una comida increiblemente buena. El dueño es muy atento y está bastante tiempo en cada mesa explicando los platos, la pasta, su fabricación (toda hecha a mano allí mismo) y recomendado platos que se adapten a nuestros gustos. Si eres vegano te presonaliza el plato para que puedas comerlo sin problemas. Todo lo que hemos probado estaba delicioso y vamos a repetir seguro.

Auténtico restaurante italiano, algo escondido en la playa de Tabernes. Pasta recién hecha a diario y postres totalmente caseros. Probamos el menú degustación, compuesto por un plato de quesos y embutidos, burratta, pan especial calentito y 3 platos de pasta a elegir. Bebida, postre, café y un chupito de limoncello de cortesía. Todo por 20 euros, para la calidad del menú está muy bien. La comida exquisita, la atención excelente, perfecto control anticovid y camareros super profesionales. Volveremos seguro a probar la pizza.

Excelente! La comida buenísima, pasta de elaboración propia,todo riquísimo, y la atención estupenda. La pasta y salsas varían en función del día, por lo que hay platos no están en carta. Dijimos al hacer la reserva que dos comensales eran vegetarianos y nos prepararon varias opciones especiales para el día de la reserva, unos raviolis rellenos de crema de calabaza con panna y pistacho que estaban espectaculares. La selección de quesos buenísima tambien, con quesos exclusivos italianos que no encuentras en comercio. Los camareros un absoluto encanto y súper atentos, y el cocinero y dueño vino después de la comida a preguntar qué tal todo, muy amables. Repetimos seguro

Tienen una variedad de postres típicos (tiramisu, mascarpone, etc.), pero creo que el postre fue lo más débil de la comida. El lugar es muy acogedor, limpio y bien cuidado, incluyendo los baños. Debo mencionar que no es un restaurante económico, pero la comida es muy rica y la calidad se paga. Lo recomiendo si quieres probar auténtica comida italiana. Sin embargo, una observación: nos advirtieron que el mínimo a pedir es de 15 euros por comensal. Teníamos claro que queríamos un menú que era más caro, pero me pareció un poco de mala educación imponer un precio mínimo, especialmente si se va con niños (aunque ese no fue nuestro caso).