Lo Pont - Sort

Hablan por sí mismas las fotografías, enmarcadas en un lugar de hermosas vistas, que acompañas con una comida a la altura del paisaje. En resumen, muy recomendable.

Raúl es un camarero que enamora al mundo entero con ese bistec al punto Me hizo ver el mundo En esta ocasión en el ocaso Con Raúl yo me caso Para terminar esta poesía Decir que al servicio Raúl le sabia

Se come muy bien. Comida tradicional catalana como en casa. Recibimos un trato muy bueno por parte del personal los camareros de diez. Un sitio para repetir

Bar restaurante de los menús tradicionales, simple, con mantel de papel. Sin embargo, ofrece un menú de 15 euros los domingos con 5 primeros y 5 segundos para elegir, además de postres y bebidas. La atención de los camareros y el servicio son excepcionales, y la limpieza también. Se adaptan a algunas solicitudes especiales, como opciones vegetarianas. Es el tipo de restaurante que frecuentaba cuando trabajaba fuera: simple, económico y rápido, pero que no te deja con hambre. Los platos son típicos de un restaurante tradicional: pasta, carne a la plancha, ensaladas, etc. Tal vez no lo elegiría para llevar a mis jefes, pero es ideal para ir con familia, amigos o para pasar un rato. Hay bastante lugar para aparcar y no suele estar abarrotado. De hecho, me detuve allí porque no encontré dónde comer de los recomendados, y sin duda repetiría sin dudarlo. No le doy un 5 simplemente porque es un restaurante sencillo, nada excepcional, pero lo recomiendo si no quieres dejar de comer y pagar de más sin necesidad. Otra cosa a tener en cuenta es que hacen 3 turnos para la comida: a las 13h, 14h y 15h. Si no llegas a tiempo, te programan para el siguiente turno, así que siempre es mejor reservar. Repetí el jueves de julio y el camarero me dijo que no era necesario reservar porque no había mucha gente. Afortunadamente, lo hice porque estaba lleno. Hay muchos trabajadores en la zona debido a la buena relación calidad/precio.

Teníamos una reserva a las 14:30, pero llegamos a las 14:00 con la intención de tomarnos una cerveza mientras esperábamos. Nos ofrecieron preparar una mesa para comer de inmediato, lo cual fue genial. El menú completo de primera elección, con un risotto muy rico y una ensalada también excelente. De segundos, pedimos churrascos, que estaban muy buenos, aunque notamos que la patata estaba un poco seca. El brownie de postre y la botella de filiberto (yogur, crema y grosella) estaban deliciosos también. La atención fue buena y rápida. Las instalaciones estaban muy limpias. Para el personal, un 10/10; hicieron mucho trabajo con tan pocos recursos, fueron rápidos y atentos. El precio fue razonable para el menú del fin de semana, 36 casi 37 euros para dos personas.