Lillas Pastia - s/no

Segunda visita a Lillas Pastia y segunda vez acierto total. Menú Carmen, exquisito con aroma a trufa: La delicada crema de cebolla, el salsifis con mollejas rustidas, el arroz de trufa, el ravioli de tres manitas y ostras, el pargo y el lingote de ternasco. Los postres frescos y perfectos para rematar una gran comida. Un gran y bonito sitio, un equipo muy profesional y una cocina de 10. Con razón mantiene su estrella desde 1998. Gracias por tu cocina Carmelo Bosque.

La peor experiencia que he tenido nunca. Nos sentamos en la mesa y el camarero me indica (de malas formas) que debo quitarme la gorra porque es de mala educación… Me quedé perplejo, ya que hasta ahora nunca me había sucedido esto. Obviamente nos levantamos y nos fuimos. Suerte que a mi mujer no le dijeron que se quitara los tatuajes. Mejor visitad el restaurante Tatau!

Lo mejor, la atención de Cinthya y el maridaje de vinos. El local espectacular, antiguo casino con todo su glamour. Comida rica pero, algún plato (caliente) frio. Aún siendo menú degustación, algún plato escaso, casi ni para sacarle el sabor… Pero lo peor, los cuartos de baño, he visto bares de carretera con baños bastante más limpios y cuidados.

Este octubre estuvimos dos amigos comiendo en el restaurante Lillas Pastia, tomamos el menú degustacion, fue excelente....la única pega fue que al final de comida el servicio fue lento....

Menú degustacion de trufa maravilloso. Maridaje sorprendente y rico. Personal profesional, simpático y agradable. Recomendable al 100%.