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Bidrage med feedbackPequeño local. la comida buena pero escasa, el rissoto rico pero pequeño y un plato muy pequeño. Me quedo con el buen trato y aconsejo platos con más cantidad. ¡Tienes que irte!
Para nada recomendable si lo que quieres es un precio mínimo (de esos acostumbrados a bares de poligonos y peñas con menús a 8 € . No vayas si lo que quieres es algo rápido (un aquí te pillo, aquí te mato frito o pasado por microondas sin descongelar previamente . Prohibida la entrada a los que acostumbran esperar pidiendo número en la puerta de un asador con forma de nave (en el que no se sabe si el ganado es lo que hay en el plato o los que se van a comer lo que hay en el plato . El Remedio ha sido toda una experiencia extraordinaria en todos los sentidos, pero en especial el del gusto, a la que hay que ir con tiempo, calma y dispuesto a disfrutarla. Los platos son exquisitos: los boniatos bravos, la carrillá de lechón, los rollitos, las croquetas, el novillo... todos los platos presentados con delicadeza y explicados con el enamoramiento y la satisfacción del artista que presenta su obra. El trato humilde y personal del dueño/cocinero/camarero es de lo mejor de toda esta experiencia. La espera es la normal entre cada plato que se hace en el momento con ingredientes frescos y de buenisima calidad. Recomendable reservar, pues el número de mesas es limitado. El precio por tener tal experiencia, bastante menos de 20€ por persona. La experiencia en sí no tiene precio.
Ya conocía la trayectoria de Paco Guzmán en sus restaurantes de Barcelona y tenía muchas ganas de probar como adaptaba su experiencia internacional al producto gaditano. Bueno, pues no defraudó y como siempre ne sorprendió: sushis de choco, de ortiguillas, de ¡cazón en adobo! Los rollitos vietnamitas delicados, transparentes, sabrosos... Y sabores clásicos que siempre apetecen como la mojama con almendras y los quesos roteños para combinar con los vinos autóctonos y nacionales de su escogida carta. Y todo se lo guisa Paco, él está al frente de cada plato que sale por la puerta. Hay que ir al Remedio y prepararse para disfrutar, sin prisas, de su buen hacer
Comida exquisita y muy original. Cocina de autor preparada al momento con mucho cariño por su dueño Paco, un excelente amfitrión, entregado y siempre de buen humor. Hemos repetido y lo seguiremos haciendo en las futuras visitas a Rota. Recomendamos las sardinas y el ceviche de pulpo. Felicidades!!!
Increíble de principio a fin. La cocina es exquisita, con platos de fusión entre la cocina española, asiática y latina. Nos impresionaron mucho los mejillones con mojo rojo y verde, ¡para chuparse los dedos! En cuanto a la atención del personal, inmejorable, con una camarera tan atenta y amable. ¡De 10!