Curral Do Marqués - Rianxo

La comida es toda una experiencia, platos originales elaborados con excelentes ingredientes, a los que mejor, déjese llevar y disfrutar. el medio ambiente es excepcional y las vistas, especialmente fuera, son grandes. los salones para comer dentro tienen una decoración basada en una mezcla ecléctica de elementos vintage, muy agradable a la vista con la que se obtiene un ambiente acogedor muy agradable. ideal para una comida o cena muy relajada y tranquila, no vengas con prisa.

Una maravilla. La comida es exquisita, el entorno es precioso y son muy ambles. Además tienen un espacio dedicado a los niños para que juegen. Una experiencia muy buena.

Buena materia prima excelentemente condimentada. Muy buen servicio. Terraza agradable. Espacio de juegos para niños. Inconveniente: muy limitado en pescados y mariscos.

Fuimos recomendados y con muy altas expectativas. No nos defraudó en absoluto. Lo primero, la terraza no puede ser más agradable, bonita decorada y con distancia entre las mesas. Probamos la croquetas, las gyozas, las costillas y el arroz con ternera. Todo está tan bueno que no conseguimos un consenso para elegir el favorito. No obstante, los postres no nos conquistaron tanto, aunque debo decir que no soy una gran fan del dulce por lo que no soy objetiva del todo. Eso si, como pequeña recomendación, sería genial una mayor explicación de los postres. El camarero nos enumeró rápidamente: brownie, torrija, tarta de manzana y milhojas. Sin más. Cuando pregunte más información sobre la milhojas me comentó que llevaba queso (sin especificar más) y no comentó nada deos frutos rojos que llevaba, otro ejemplo. También pedimos la tarta de manzana que resultó ser algo así como una versión deconstruida de la misma. No me quejo de que fuera asi, solo que hubiera sido genial que nos lo explicaran de esa manera. De todos modos, el personal fue encantador y muy atento en todo momento. Un lugar para volver y recomendar

Lugar agradable con atmósfera campestre y comida fusión. Obtuvimos la carta, aunque hubiéramos preferido un poco más de variedad, ya que muchos de los platos eran de pescado crudo. Las raciones eran de tamaño adecuado, pero con buen sabor y presentación. El trato fue amable y el servicio rápido. Hay aparcamiento, aunque puede ser difícil localizar el lugar desde la carretera si no se presta atención.