Paolo La Pizzeria - León

Muy buena comida italiana. Pedimos dos pastas exquisitas espaguetis carbonara y trofie) y una pizza melazana que estaba riquísima hecha en horno de leña. Acabamos con helado de la propia pizzería y quedamos encantados

Entramos dudando ya que no conocíamos el local. Fue un descubrimiento, salimos muy satisfechos. Muy buena atención, servicio muy rapido y comida muy rica. Pedimos un entrante la focaccia con 3 raciones muy generosas y una pizza diavola, para dos personas... de sobra, tal como nos aconsejaron. Volveremos seguro!

Pedimos una pizza con champiñones y un plato de cintas con salsa boloñesa. La pizza estaba MUY salada, de hecho se podían ver granos de sal gorda por encima de la pizza (en la vida había visto eso en una pizza) , la pasta llego fría y la salsa boloñesa no tenia casi nada de carne, era una especie de pesto liquido, por otra parte la pasta debería de estar un poco mas al dente. Habíamos estado alguna vez anteriormente y estaba correcto todo pero esta vez nos ha decepcionado mucho. Le comentamos a la camarera la experiencia con toda la educación posible y solo nos trajo la vuelta, dijo que le parecía raro, ni una disculpa ni un detalle ni nada parecido.

Realizamos reserva por teléfono a las 13h35m para cenar en la terraza para las 21h . Llegamos a la hora prevista y teníamos nuestra mensa en la terraza esperándonos Nos indican que pedimos para beber y que miremos la carta en el QR que está en la botella pegado.(original Pedimos una pizza para cada uno Capri, Pallo, Calzone, Diabola. A cual más rica. Unos postres y . Aceptan pago con tarjeta Para volver, con reserva previa.

Fuimos a tomar una caña a las 21,45. Una vez pedida, nos trae las consumiciones y nos dice que la tapa nos la trae en breve, que en ese momento no le queda. Esperando y esperando ya a las 22.30, le prefuntamos por la tapa, y nos dice que hay mucho jaleo en la cocina y no nos la puede poner. Me parece una falta de respeto al cliente por dos razones. La primera la tapa no la regalais, la cobráis y sino me puedes dar el servicio normal, lo razonable sería avisar y ya nosotros decidimos si tomamos algo o no. Segundo, si no me piensas poner la tapa no me hagas esperar por ella, se sincero y no me tengas 40 minutos esperando. Entiendo que tengais mucho curro, pero respeto nos merecemos todos los clientes, no solo los que van a comer o cenar. Yo he sido cliente vuestro en ambas vertienes y creo que el día que voy a tomar una caña no soy menos.