El Celler de Ca la Quica - Gironella

Llegamos al lugar recomendados por un conocido. Todo un acierto. Todos los platos exquisitos, producto de gran calidad y buena elaboración. Especial mención para el arroz bueno en sabor, calidad y cantidad), y un carpaccio de corvina muy rico. Hasta la pasta que le hicieron a los niños expresamente, fuera de la carta estaba buenísima. Sin duda, cuando volvamos por la zona repetiremos. Por cierto, el lugar es acogedor y el servicio amable. Sin duda, un acierto.

En los últimos seis meses he visitado este restaurante dos veces, y en ambas ocasiones me fui con una mala experiencia, el camarero es la persona más grosera que he visto gestionando un restaurante. Su actitud arrogante y falta de educación parecen ser su modo de vida (y no creo que le hayamos dado motivos para ello, ni que se lo pueda permitir). Al principio pensé que era solo yo, pero de las cuatro mesas en el comedor, tres han comentado lo mismo. Después de haber ido dos veces, prometo no volver nunca más y puedo asegurar que no recomendaré este restaurante a nadie.

El Celler de Ca La Quica es un restaurante ubicado en una antigua casa de piedra del siglo XIX, con techos abovedados y una bodega impresionante. El ambiente es acogedor y se puede disfrutar de deliciosos platos mientras se contempla el lugar tranquilamente. Es un lugar perfecto para pasar un buen rato con amigos o familiares.

Un lugar donde ir a disfrutar de la comida. Se nota que el cocinero disfruta de lo que hace. El lugar es singular y dispone de salas dónde estar tranquilo. El vino es de calidad y a buen precio. La comida es acorde a la calidad del producto. Unos 40€ por cabeza Entre semana disponen de menú a buen precio

Lugar pintoresco con buena comida. És la segunda vez que lo visitamos y esta vez me han estresado un poco las prisas por parte del metre. Supongo que iba bastante atareado.