Can Broch - Denia

Una delicia de comida, el carpaccio de atún y la carne a la plancha, con vinos fabulosos, un poco caro.

Como siempre, un 10 en todo. El lingote de foie, delicioso y ¿qué decir del chataubriand? ¡Simplemente exquisito! Dejo foto de otra delicia: la cheescake con fruta de la pasión.

Fuimos a cenar en ese restaurante en Navidad. La comida estaba bastante bien en general. Sin embargo, creo que los platos principales no estaban a la altura. No porque no fueran sabrosos, sino porque me pareció un poco triste que los acompañamientos de los platos fueran tan simples. Aparte del postre que, en mi opinión, era muy malo, todo lo demás estuvo bastante bien. El servicio no estuvo a la altura en un día tan especial. En mi opinión, faltaba personal para poder gestionar el restaurante, especialmente en un día como Navidad. En dos ocasiones, nos trajeron platos para 2 personas, de las 10 que éramos, haciendo que el resto tuviera que esperar hasta 10 minutos. Esto deja una mala impresión. También pedimos bebidas que no nos traían. Tuvimos que pedir hasta 4 veces que nos trajeran botellas de agua. Para la carne pedimos vino y se olvidaron de traerlo casi cuando ya se había acabado. No nos ofrecieron polvorones o una copa de cava de cortesía al terminar la cena. Además, estábamos muy apretados entre mesas. Parece que intentaron abarcar más de lo que podían. En resumen, el restaurante es un lugar muy bonito donde se come muy bien, pero no lo recomendaría para un evento como la Navidad.

Estuvimos de comida de empresa ayer. La calidad de los platos es superior y también su presentación. En especial el solomillo a la piedra estaba exquisito. El personal es atento y amable. Salimos muy contentos, seguro que volveremos.

Algunos días te ofrecen una sorpresa. Eso nos ha pasado hoy en Can Broch. Íbamos a cenar y no había nadie. Nos han sentado en nuestro rincón favorito, han encendido todas las luces y nos han regalado con una preciosa música de cantautores españoles y americanos. Los platos una delicia y el trato inmejorable. La cena se ha convertido en un regalo. Gracias.