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Bidrage med feedbackFuimos con reserva, pues fue una sorpresa por nuestro aniversario que me dio mi esposo. Había muchas mesas vacías, y la que nos asignaron, tuvimos que pedir que nos la cambiaran, pues había en ella una gran corriente de aire, con mucho frío. Mi marido pidió uno de los platos del menú del día: risoto con vegetales, y estuvo muy rico. Yo por problemas de salud no puedo ingerir ningún tipo de almidón ni cereales y ahí estuvo el problema, la falta de predisposición a cambiar el menú, les cuento: había un lomo de cerdo con tortilla de papas, les pedí que cambiaran la tortilla por una ensaladita, no se puede. OK. Una ensalada césar que ofrecen tiene semillas de quinoa, le pedí eso y que no le pongan las semillas. Tampoco pudieron. Terminé pidiendo un triste pollo grillado con ensalada de rúcula y parmesano. El pollo duro, no sé si por pasado en la cocción o de estar frizado mucho tiempo, mal marinado, con gusto a nada, sin mayonesa siquiera, horrible, y la ensalada, insulsa, lamentable. La verdad que es bastante pobre la carta, totalmente olvidable. No lo recomiendo para una ocasión especial, un restorante común, pero muy caro.
Muy buen lugar para cenar. La mesa fría excelente, especialmente para quiénes nos gusta saborear variedad de platos fríos. Sabores delicados y variados.El plato caliente al servirse desde el bufé pierde quizás el punto justo que estos platos requieren.Los postres también se lucen por variedad y delicadeza de sabores
Atención excelente! La comida muy rica.Pedí salmón con puré mixto y estaba exquisito.El helado artesanal bueno.Quizás un punto a mejorar en la ambientación del lugar.Hay q volver
Destaco el lugar por su excelente ubicación y fácil acceso. el ambiente es muy tranquilo, espacioso y refinado, pensado para distenderse y logra su cometido.La carta es variada pero no extensa. Las propuestas denotan preparaciones complejas, de buen gusto y alta cocina. La recepción fue muy agradable, como se esperaría de un lugar con altos pergaminos. Un rápido ofrecimiento de una bebida fría en un día tórrido resultó un detalle de gran impacto. Sin embargo, este se perdió rápidamente cuando percibi que inmediatamente se nos ofreció la carta de comidas pero no la de vinos, la que solo llegó a mi requerimiento y luego de estar en la mesa el primer plato. Si la intención era degustar alguno de las excelentes opciones de vinos que ofrece la basta cava, no se pudo cumplir. El segundo paso consistió de codorniz rellena y carne sobre puré mixto. La codorniz de buen sasbor pero sobre cocida, con partes muy duras que hacían imposible de comer. La carne bien preparada, de buen sabor pero no era algo sobresaliente. Terminamos con flan y helados. Para destacar, la presentación de los platos, el tiempo de atención apropiado. La sorpresa, la carta de vinos y el punto de cocción, aspectos que para un restaurante de comida gourmet de nivel internacional no debieran ocurrir.Es caro, el precio no justificó lo ofrecido.
Buena atención, excelente comida, a precios que están acordes al hotel donde uno està almorzando o cenando. Lo que no me gusta es la ubicación del restaurant. Es en el subsuelo, y es el mismo sitio de los desayunos. No tiene vista al exterior, no entiendendose como un hotel tan grande, no ha previsto un lugar con una vista de la ciudad de Còrdoba. Salvo por eso lo recomiendo plenamente, comimos 2 veces, y estuvo muy bueno. La ensalada Cesar , la ensalada Cesar de mariscos, los pescados, todo estuvo perfecto. Volverìa sin dudas.
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