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Bidrage med feedbackPersonal muy mal educado. El camarero muy agresivo con los clientes. No pienso volver y voy a correr la voz. El personal tendría que recibir un curso de buena conducta y trato con los clientes.
Se pidió a la camarera un cortado y un descafeinado de máquina. La camarera trajo un café con leche y un descafeinado de sobre. Nos extrañó, pero nos lo tomamos sin problema, mientras lo hacíamos se dió cuenta de su equivocación y nos dió la opción de cambiarlo. A la que le dijimos que ya lo habíamos probado que no pasaba nada. Hasta ahí, ningún problema debido a que todos nos equivocamos. A la hora de pagar, fui a la caja y la chica me preguntó que habíamos tomado y la camarera le dice es la mesa que me equivoqué. A lo que añadí yo había pedido un cortado y un descafeinado y la encargada dijo de muy malas formas y con un tono de voz elevado cobrale lo que se les sirvió! Le pedí la cuenta para comprobar lo que me había cobrado, no por la diferencia a pagar que era mínima, sino que todavía que no le hago cambiar el café, me cobra su equivocación. Le digo a la cajera que eso no era lo que yo había pedido, a lo que esta me dice que cumple órdenes. Y la encargada dice esto es lo que hay! A lo que yo contesté, soy clienta fija y despreocúpate que con no volver tengo. No reclamo la diferencia de los cafés, reclamo la falta de educación y me quedé con ganas de pedir la carta de reclamaciones. He trabajado al público mucho tiempo y creo que lo mínimo que debe haber es una buena forma y admitir las equivocaciones y no hacerlas pagar al cliente y mucho menos dejarme a un sitio al que disfrutaba a menudo con mi familia, a dejar de ir. A veces las formas se pierden y es una realmente pena que un buen lugar, tenga esa poca clase a la hora de gestionarlo.
Es imposible una atención peor por parte de las tres personas al frente del local. Ineficiencia, lentitud e ,incluso, grosería. Demencial
Muy mala experiencia, nada recomendable. La camarera bastante desagradable, vino a recoger la mesa de malas formas, se le escapó una servilleta usada de las manos encima de la mesa y dijo pues ahí se queda para luego pedirme que se la diera yo (estamos hablando de una servilleta usada por otra persona), y luego no le pasó ni un paño a la mesa y la dejó toda sucia. Por si esto fuera poco tienen gofres, creps y tortitas en la carta y no les quedaba de nada. Un desastre, deberían de tener mejor previsión y controlar un poco al personal.
Esta mañana me dirigí al bar el moli para tomarme un desayuno. Estuve cinco minutos esperando a que me atendieran y me limpiaran la mesa para poder sentarme. Para mi sorpresa en ningún momento ninguna camarera me atendió, sino atendió a otras mesas. Lo comento en el Google reseñas y para más narices me contestan de forma burlesca.